Quiero empezar diciendo qué si algún día me atrevo a decir lo
que siento por ti, quiero que leas esto, ya que son mis sentimientos:
Es momento de hablar y pensar en un pasado, en un futuro, y
lo más importante, en un presente, porque no puedes vivir tu día a día si haces
caso a quien te quiere dañar todavía.
Tienes ganas de gritar, de quitarte ese peso interno. No
puedes mirar a tu pasado porque puede que te avergüence o simplemente no te
sientas orgulloso de lo que hiciste; no puedes vivir el presente porque no
confías en mucha gente; no puedes vivir el futuro porque lo ves muy duro.
Tienes que ser fuerte, coger y aprender del pasado, para vivir fuerte el
presente y comerte todo lo que venga en un futuro.
Si te lastimaron da igual, camina hacia delante y nunca mires
atrás, a lo largo de la vida mucha gente te criticará, te dirá que no puedes,
te intentaran hundir y todo porque ellos nunca pudieron conseguirlo o no
pueden; vivimos en un mundo en el que si uno no puede nadie puede e intentan
hacer lo imposible para que no cumplas tus sueños, si hay “libertad” hay
sueños, si hay sueños hay un motivo para luchar, y si hay un motivo para luchar
hay un motivo para seguir adelante en el día a día.
Mi pasado está nublado, cuesta olvidar y eso afecta a mi
presente, los miedos no se olvidan, y no te gustaría volver a vivir lo que un
día te hizo sufrir. Aparentaré ser fuerte, pero es solo una capa superficial,
por dentro se encuentra alguien que ha aprendido a luchar a base de palos y
decepciones; si no paso página no creo que pueda volver a confiar en mí… Solo
yo soy dueño de mi destino, solo yo soy capaz de llevar mis límites al máximo,
solo yo soy capaz de romperlos; olvide lo que me enseño en un día una gran
persona, y es seguir mi día a día al máximo sin rendirme.
También me ha costado aceptar que muchas personas se han ido y no volverán, a estas me habría gustado decirles todo lo que siento aunque ya no puedo y me arrepiento, todos lo que tengo aquí dentro son sentimientos que nunca salieron y se quedaron estancados en mi interior, haciendo que duela este pobre corazón.
También me ha costado aceptar que muchas personas se han ido y no volverán, a estas me habría gustado decirles todo lo que siento aunque ya no puedo y me arrepiento, todos lo que tengo aquí dentro son sentimientos que nunca salieron y se quedaron estancados en mi interior, haciendo que duela este pobre corazón.
Y para concluir solo me hace falta decir que gracias a ti,
por aparecer en mi vida y enseñarme a sonreír, eres lo mejor que me ha podido
traer el destino, no quiero que se separen nuestros caminos, por ti, por mí,
por nosotros luchare, para conseguir un sueño que comenzamos en diferentes días
pero por una ilusión que a veces se nos olvida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario